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Reforma Laboral, indicaciones encontradas

El Mostrador Mercados

 

sergio-moralesEl pasado lunes venció el plazo de indicaciones al proyecto de reforma laboral y con gran entusiasmo, bien sea para moderar y extremar el contenido del texto enviado por el Ejecutivo, se han presentado casi 900 indicaciones

Los principales ejes de algunos parlamentarios de la Nueva Mayoría van por un empoderamiento sin precedente de los sindicatos, a través del establecimiento de la negociación por rama, mediante la obligatoriedad de la negociación colectiva interempresa, la supresión de algunas prácticas antisindicales de los directores y los trabajadores, incorporar el reajuste al piso mínimo y eliminar los pactos de adaptabilidad.

En cambio, la oposición con sus indicaciones busca devolver poder a los trabajadores y generar mecanismos que equilibren los derechos de los trabajadores y de los empleadores, por medio del restablecimiento del descuelgue voluntario durante la huelga, que la extensión de beneficios sea siempre de común acuerdo entre las partes del contrato colectivo –empleador y sindicato–, exigir representación mínima para la titularidad sindical, así como una restructuración de las prácticas antisindicales, entre otras materias.

Comparando las posturas de ambos sectores es posible constatar las diferentes visiones respecto a la forma en que deben tratarse las relaciones laborales.

Por una parte, el Gobierno y sectores oficialistas pretender entregar derechos propios de los trabajadores, como son la negociación colectiva, la huelga, la obtención de mejoras laborales, por medio de extensión de beneficios y negociaciones directas, única y exclusivamente a los sindicatos a través de un monopolio sindical solapado. Asimismo, no se hacen cargo de la huelga como una institución de última ratio, pues implica el ejercicio de la autotutela, la cual se encuentra estrictamente limitada desde que el Estado es tal, debiendo asegurarse un ejercicio pacífico de la misma que no lesione la integridad de las personas y de los bienes.

La Alianza, por su parte, haciéndose cargo de las demandas laborales, pretende "emparejar la cancha" de manera real y eficiente, y crear una en la cual las partes se vean motivadas a negociar por medio de mecanismos transparentes de información que faciliten a las mismas alcanzar acuerdos que mejoren las condiciones de trabajo, y que además aumente la productividad por medio de los pactos de adaptabilidad. Asimismo, pretende devolver el derecho de los trabajadores a elegir negociar, sindicalizarse, descolgarse de la huelga, solicitar la censura, entre otras cosas.

La discusión en particular del proyecto no puede reducirse a meras ideologías, sino más bien las decisiones que se adopten deben velar por el respeto de los derechos de todos los trabajadores, tanto a aquellos que están trabajando en el sector privado de manera formal, como a aquellos que no lo están, proteger el emprendimiento y las fuentes de trabajo, por medio de mecanismos que reduzcan la conflictividad y potencien la productividad, e incentivar el premio al mérito y la superación personal.

Columna de Sergio Morales, Abogado del Programa Legislativo de LyD, publicada en El Mostrador Mercados.-

 

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