Nadie puede negar que luego de la reforma tributaria muchas pymes quedaron en el sistema de tributación semiintegrado.

Y, aunque se ha tratado de minimizar su impacto -dado que representa un porcentaje menor del total de pymes del país-, lo cierto es que son 150 mil empresas (de no más de 160 mil que se verían beneficiadas con la reintegración del sistema).

Tomando en cuenta que son precisamente las pymes las que dan una mayor proporción de empleo, se tiene (según información del INE) que solo en empleo asalariado privado estas empresas representan un 60%; es decir, alrededor de 2.900.000 ocupaciones de calidad, sin contar el trabajo por cuenta propia que pueden generar-son proporcionadas por ellas. En Chile, existen aproximadamente 900 mil pymes, es decir, aquellas afectadas por el sistema semiintegrado representan en torno al 17%, lo que significa que emplean, de manera asalariada, a aproximadamente 483 mil personas. Más y mejores empleos (de calidad) prometió este gobierno y, más allá de eslóganes sobre "ricos y poderosos", pareciera que el proyecto de ley que moderniza la legislación tributaria recién presentado apunta en esa línea.

Carta de Carolina Grünwald, Economista Senior de Libertad y Desarrollo, publicada en La Tercera.-